Ciudad de México, (EFE).- La Cumbre de Excelencia Médica Amgen (CEMA 2023), realizada en Quintana Roo, en el sureste de México, culminó luego de la presentación de varios avances biotecnológicos para el tratamiento del cáncer y terapias de soporte.
El foro internacional reunió a más de 300 especialistas nacionales e internacionales, quienes discutieron sobre las innovaciones para padecimientos como mieloma múltiple, leucemia linfoblástica aguda pediátrica y adulta, cáncer colorrectal metastásico, cáncer de mama y cáncer de pulmón de células no pequeñas.
En el evento, que fue inaugurado por Susana Suárez, directora general de Amgen México, se destacó la importancia de abordar el cáncer en el país, pues según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, durante el primer semestre de 2022 los fallecimientos por tumores malignos representaron la tercera causa de muerte de la población mexicana.
Además, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el cáncer de mama continúa siendo el más mortífero del país, pues tan solo en 2020 cobró la vida de más de 7.000 personas y fue el que más casos nuevos reportó, con más de 29.000.
MEDICAMENTOS BIOCOMPARABLES
En el encuentro CEMA se abordó la llegada a México de los tratamientos biocomparables como alternativa terapéutica.
Los expertos explicaron que los biocomparables, que requieren de aproximadamente 250 pruebas para garantizar su potencia, pureza y calidad, han demostrado clínicamente ser altamente similares al medicamento de referencia.
Además, “juegan un papel importante en la sustentabilidad de los sistemas de salud no solo en México sino en el mundo, ya que generan ahorros significativos y apertura del mercado”, señala un comunicado de Amgen.
Actualmente en México, esta firma cuenta con biocomparables para el tratamiento del cáncer colorrectal metastásico y cáncer de mama localmente recurrente o metastásico.
MEDICINA DE PRECISIÓN
Los medicamentos biocomparables también forman parte de la medicina de precisión, que ayuda a generar planes de tratamiento individualizados para cada paciente e integran pruebas de biomarcadores, las cuales son útiles para dar información sobre el funcionamiento de las células, la evolución del tumor y ayudan a predecir la posible respuesta de un tumor ante un plan de tratamiento específico.
Los especialistas coincidieron en que la integración de los biomarcadores en la práctica clínica de rutina resulta parte fundamental para que los médicos seleccionen el tratamiento correcto para el paciente de una forma personalizada.
Asimismo, los pacientes obtienen beneficios pues evitan someterse a la toxicidad innecesaria de un tratamiento ineficaz o pueden tener un tratamiento más efectivo contra su enfermedad.
“Afortunadamente existen diferentes pruebas de biomarcadores que pueden ayudar a detectar estas enfermedades a tiempo. Estas nos ofrecen un panorama sobre el uso de alternativas terapéuticas como los biocomparables”, dijo Max Saráchaga, director médico de Amgen México. EFE
